Desde que el ayuntamiento se hizo cargo de la gestión de las colonias felinas en octubre del pasado año, se han castrado con el denominado método CER 268 gatos, 135 machos y 133 hembras, los cuales portan ya todos los chips a nombre del Ayuntamiento, las vacunas antirrábicas y la desparasitación.
La delegación municipal de Salud, que dirige la concejal Zuleica Molina, destaca que la participación de los voluntarios está siendo fundamental, con un total de 81 acreditados, los cuales han recibido una formación por parte del Colegio de Veterinarios, para llevar a cabo unos protocolos de alimentación e higiene ambiental apropiadas para la buena convivencia de los gatos comunitarios y los ciudadanos. A nivel municipal se recuerda que las personas que no estén acreditadas por el Ayuntamiento, no deben echar de comer a los animales en la vía pública, ni manipularlos, pudiendo ser sancionados, según establecen las Ordenanzas Municipales en esa materia.
El pasado 29 de marzo de 2023 se publicó en el BOE la Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales.
Centrándose en la gestión y control de colonias felinas, esta normativa supone un gran avance y también un gran reto para los Ayuntamientos, ya que la Ley los obliga a esterilizar e identificar a todos los gatos comunitarios del municipio.
Desde el Ayuntamiento, no se están creando colonias nuevas donde antes no existían, solo se identifican, controlándolas y protegiéndolas como
bien especifica la ley mencionada anteriormente. Los gatos que existen, no se
pueden movilizar de un sitio a otro, ya que eso supondría una desestabilización y posible maltrato para el animal, por lo que lo único que se hace es esterilizar para que no se sigan reproduciendo, higienizar el entorno y valorar los que son sociables para buscar un hogar de adopción.
Desde la concejalía se subraya que la Comisión Felina y los voluntarios están siendo un pilar fundamental en el buen desarrollo de la gestión de las colonias felinas. En ocasiones, surgen conflictos vecinales por los gatos ferales, cuestiones que llegan a través del ayuntamiento, solicitando ayuda mediadora de la Comisión cuyos integrantes se reúnen con las partes implicadas para intentar resolver cada problema de manera personalizada según el caso.
Además, todos los animales que se llevan a castrar, se hace a través del
voluntariado, ya que los conocen y tienen más fácil acceso a ellos.
Actualmente hay censadas 88 colonias de gatos comunitarios en el municipio, con un número aproximado de 1200 individuos, de los cuáles, ya se han castrado casi la mitad, muchos de ellos a través de los voluntarios.
Los gatos, aunque hayan nacido en libertad y sean asilvestrados, son considerados animales domésticos y están protegidos por la ley de protección animal.
Es muy complejo controlar las zonas donde viven los gatos comunitarios, ya que durante muchos años han vivido sin protección formal de las administraciones, dado que no había legislación al respecto, considerándose gatos abandonados y no gatos comunitarios con derecho a vivir en lugares donde habían constituido un hábitat para ellos. Con la nueva Ley, es importante tomar conciencia que esta cuestión ha cambiado y que es fundamental respetarlos, sino por empatía por imperativo legal.