La concejal y delegada municipal de Participación Ciudadana, Ceferina Peño, ha mantenido esta mañana una reunión con responsables de la concesionaria de aguas Aqualia. Varios asuntos han centrado el orden del día del encuentro, entre los que cabe reseñar los relativos a determinadas demandas ciudadanas por el estado de la red, sanciones y puntos negros.
En primer lugar, se ha abordado la situación de los vecinos de la calle Guadalupe, sobre los que recaían ciertas sanciones por parte de la concesionaria. La concejal ha trasladado la situación del suministro y su repercusión en las zonas comunes de la barriada y por parte de Aqualia se ha fijado el compromiso de suspender dichas multas y municipalizar el servicio mediante el establecimiento de contadores.
Otro caso similar ha sido el que afecta a vecinos de la calle Sol y Sevilla, que al carecer de agua se ha instado desde el Ayuntamiento a la ubicación de un contador municipal. Mediante declaración jurada, cada uno de los afectados se compromete a abonar el coste del servicio por medio de facturas diferidas durante el tiempo que se prolongue hasta la dotación de las correspondientes cédulas de habitabilidad para las viviendas.
Por último, se ha tratado la elaboración de un protocolo para situaciones puntuales y puntos negros denunciados por parte de los vecinos. El objetivo es informar a la ciudadanía de las deficiencias existentes en cada punto de la ciudad, posibles inversiones, posibilidades de actuación en cada momento dado y costes de ejecución.
