El alcalde ha tenido este gesto al tratarse, según sus palabras, “de una leyenda viva de La Línea”. De profesión sastre, o modisto como él mismo reivindica, ha estado animadamente charlando con el alcalde relatando sus vivencias.
Esta visita ha sido aprovechada por la primera autoridad municipal para relatar a algunos de los trabajadores de este centro los pasos que se están dando para conseguir tanto el final de las obras de la nueva residencia como la necesidad de dotar de más personal a la actual.