El teniente de alcalde delegado de Playas, Juan Macías, fue informado esta mañana de sábado por los responsables del servicio de salvamento, de la parición de una mancha aceitosa de color anaranjado en la playa del Burgo del litoral de Levante.
Una vez en el emplazamiento y tras las inspecciones y el estudio por parte de los técnicos, lo que en principio se pensó que podría haber sido un vertido de combustible, resultó ser un fenómeno natural a consecuencia del desove de especies como el boquerón y la sardina y la presencia de microalgas. Aunque la aparición de estas manchas ha causado cierta alarma social entre los usuarios, la presencia de estas huevas no revisten peligro para la salud. Un fenómeno similar se lleva produciendo en la costa malagueña desde finales de junio que ha ido desapareciendo de forma natural.